Después de casi dos horas, Augusto da por finalizada la
reunión, y yo salgo hecha una furia. Me he pasado dos semanas buceando entre
papeles y con los ojos pegados a la pantalla del ordenador, sacando informes y
revisando documentos para nada. La cuenta de la empresa por la que YO me he
estado matando todo ese tiempo, se la acaba de llevar Jorge, cuyo mayor mérito
parece ser conocer de algo a uno de los asesores del Gerente.
Para colmo, el muy capullo me alcanza a mitad del pasillo y
me coge del codo para detenerme.
—Has hecho un trabajo estupendo, Lara.
—Ya. Del que tú has sabido sacar partido, salta a la vista.
Se queda allí clavado sin saber qué responder mientras me
encierro en mi oficina para tratar de superar mi cabreo. No hay derecho. Desde
que empezó a trabajar con nosotros, hace un año, no hace más que competir
conmigo. Antes, yo era la joven promesa, la que destacaba y se ganaba a los
clientes con su eficacia y su mano izquierda. Ahora es Jorge el que utiliza su
labia y su encanto para quitármelos en mi cara. Esto se está convirtiendo en
una lucha sin cuartel.
Le odio. Es una pesadilla. Seguramente hasta una mala
persona.
Aunque lo cierto es que no sé mucho de él, ni me interesa.
En su primer día de trabajo, me pareció un tipo muy atractivo, con ese pelo
medio cobrizo que le da un aire de niño malo, esos ojos azules y esa sonrisa
pícara. Pero antes incluso de que pudiera hablar con él, empezaron los
problemas. Lo mandaron a un curso al que yo esperaba ir, porque según el jefe,
su nuevo fichaje necesitaba empezar a ponerse al día cuanto antes. Y su antiguo
fichaje, o sea, yo, se lo tomó fatal. La animadversión campa a sus anchas entre
nosotros desde entonces.
Estoy deseando que llegue el jueves para que empiecen las
vacaciones de Semana Santa y me pueda olvidar de ese impresentable por unos
días.
Ayer, sin ir más lejos, tuvo la desfachatez de preguntarme a
dónde iba yo. Coincidimos en la máquina del café, con otros dos compañeros. Él
estaba comentando algo como que le debía un par de noches de juerga a un amigo
de la universidad al que iba a visitar. Yo me limité a insinuar que había hecho
planes con unas amigas y me dijo con su habitual tono de chanza, que me pone de
los nervios:
—¿Os vais al pueblo a ver procesiones?
¡Al pueblo! ¿Pero de qué va?
Pues no, no nos vamos al pueblo. Nos vamos a Dublín y nos lo
vamos a pasar de muerte. Y me voy a beber toda la cerveza de Irlanda. A ver si
su juerga de universitario supera a la mía.
...
*Esto es solo un fragmento del relato completo. "Dormir con el enemigo" ha sido incluido en el libro "Doce maneras de enamorarse", publicado en Amazon y disponible para su compra AQUÍ.
Ella me ha gustado mucho!
ResponderEliminarTan mal hablada, tan loca y sobre todo, tan natural.
Él, un bombón! ;)
Me gustan las protagonistas imperfectas pero naturales... jajaja... y los bombones ni te cuento... ;-)
EliminarGracias por comentar!
ah buenísimoooo, pero amerita segunda parte Lucía!!! por lo menos.. me encantó! ;-)
ResponderEliminarGracias, Alejandra, pero de momento no tengo intención de escribir segunda parte de ninguno. Una vez empecé con la segunda parte de un relato... y salió una novela.
EliminarLucia, buenisimo como siempre!! Ainsss que mono el muchacho y que cabezota ella...se parece a mi...jajajaja.
ResponderEliminarGracias, Ana. Y todas tenemos algo de cabezotas, ¿no? yo al menos sí... jajajaja
EliminarPobre chica! Empieza como el colmo de la mala suerte, pero al final Jorge resulta ser un encanto!! Tela con las amigas, la gran evasión ! Algo no apto para menores... Este chico es un amor , que no soy fácil, q guapo !
ResponderEliminarLe había juzgado erróneamente... jejeje... el pobre no era tan malo.
EliminarSi es que se veia venir......aixxxx el Jorgito el Jorgito jajajajajaja xD Esta mujer que se pensaba lo que no era....aunque me encanta su caracter jajajaja xD y él bueno..aixxx que hombree....quiero que me pase eso a miiiiiiiiiiiiiii!! jajajajajajaa xD Bueno sigamosss que me tienes enganchadita perdia!! jejeje ;)
ResponderEliminarUn besazo!!
Muakss
Ana
Me gustan las chicas con carácter, aunque a veces se equivoquen... jajajaja. Un besazo!
EliminarPe-pero por qué no me han ocurrido a mi nunca estas cosas? ¡joooooo! Me encantan tus historias.
ResponderEliminarMás más. ;)