lunes, 30 de junio de 2014

Lecturas del mes (Junio 2014)

Empecé este mes con la necesidad de bajar un poco el ritmo, porque si bien las lecturas de mayo no fueron muchas, lo cierto es que me resultaron bastante intensas. Tenía claro que en junio me esperaban dos continuaciones de esos mismos libros, así que para empezar, opté por elegir algo de una temática diferente, breve y ligero, por así decirlo:

21. LA DONCELLA Y EL CABALLERO, de Cathryn de Bourgh.


Con esta novela al principio me llevé un poco de chasco, para qué negarlo. En cierto modo, por la forma en que está escrito, parece un cuento, supongo que porque la historia está muy poco desarrollada, casi contada como un resumen de algo más grande. Me ha costado un poco entrar en ella y más aún creérmela, y para mí eso es fundamental. El lenguaje tampoco me ha convencido del todo, y la corrección es mejorable. 
Tal vez simplemente no era lo que yo necesitaba leer en este momento, o el problema es que tenía una idea preconcebida (y equivocada) de lo que podía encontrarme en ella. A pesar de eso, tengo que reconocer que es una historia bonita, se lee fácil, es cortita y entretenida. Lástima que no le hayan sacado un poco más de jugo. 

22. LA HECHICERA REBELDE, de Alaine Scott.


A pesar de lo mucho que me gustó "La esclava Kisha", reconozco que este me ha gustado incluso más. Los personajes de Dayan y Erinni, de los que apenas vemos la punta del iceberg en el primer libro, aquí, simplemente, se salen. Son dos seres que se han hecho duros a fuerza de golpes, pero que también se saben vulnerables y luchan con uñas y dientes para no dejar ver esa debilidad. Su relación, tremendamente intensa y apasionada, fluye con una naturalidad pasmosa, y la historia me cautivó desde la primera página. Me ha gustado especialmente saber más de la vida de Kargul a través de los ojos y los recuerdos de ambos. Es un mundo que me tiene fascinada.
Me da tanta pena terminar esta serie que creo que esperaré al mes que viene para leer "La princesa sometida". Si aguanto, claro.

23.OTRA VEZ TÚ, de Alice Kellen.

Reconozco que esta novela me ha sorprendido. Mucho. La compré porque estaba en oferta y porque la sinopsis me atrajo poderosamente. Tenía pinta de ser una comedia romántica ligera, fácil de leer, y con un poco de suerte, hasta entretenida. Lo cierto es que me quedé corta en mis suposiciones. Es todo eso y más. Me lo he pasado genial leyéndola. Tiene puntos realmente divertidos, y en algún momento hasta me ha hecho emocionarme. Es una historia preciosa, muy entretenida y muy bien contada, con un ritmo fantástico que te engancha desde la primera palabra, y unos personajes geniales, desde la pareja protagonista, cada uno con sus inseguridades e imperfecciones, hasta todos y cada uno de los secundarios. Es perfecta para pasar un buen rato y terminar de leer con una sonrisa en la cara y esa sensación tan agradable que te deja una historia romántica con el final adecuado. Muy recomendable.

24. HENRY, el viaje de H , de Aida Cogollor


La verdad es que Henry no ha sido del todo lo que esperaba, pero para bien, me explico: si bien Helena me encantó, tenía partes muy intensas, de esas que en cierto modo, te desgastan emocionalmente (al menos a mi, que me meto de cabeza en los libros que leo), y en el momento en que empecé el libro, tenía muchas cosas en la cabeza y prefería algo un poco más ligero. La verdad es que ha sido perfecto: muy entretenido, con unos personajes igual de alocados y divertidos que los de Helena, con problemas, con carácter, con una forma realista y personal de enfrentarse a su día a día que te hace identificarte con ellos sin ningún esfuerzo. Me ha hecho sonreír muchas veces, enfadarme unas cuantas, pero sobre todo sentir mucho. Una historia preciosa. 


Y aunque me hubiera gustado terminar alguno más, no ha podido ser. Tengo ya empezado el quinto libro de Amos y Mazmorras, de Lena Valenti, pero ese ya estará en la próxima entrada, dentro de un mes. 
¿Habéis leído alguno de estos? ¿Os causaron la misma impresión que a mí? ¡Me encantaría saber vuestra opinión!



sábado, 21 de junio de 2014

Marketing para escritores (II) Quid pro quo

Reconozco que esta entrada se me ocurrió un poco de rebote. O mejor dicho, por un rebote. Algunos veríais el comentario en mi muro de facebook, otros no, pero, casualmente, la misma semana, Laura Nuño, autora a la que admiro muchísimo, hizo un comentario parecido en su blog, y yo pensé "¿será que eso del hoy por ti, mañana por mi, o quid pro quo, no existe?"
Mi comentario era una reflexión sobre la extendida costumbre de invitar a los contactos a picar "me gusta" en la página de facebook de tu blog, tu libro, o lo que sea que te representa. Yo lo hago de cuando en cuando y recibo también muchas invitaciones. Hasta ahí todo es normal, vamos, digo yo.


Por lo que yo entiendo, el número de "likes", o "me gusta" de una página, no es solo un indicativo de cuánto gusta, sino también de cuánta difusión pueden tener los contenidos que publica, y ambas cosas son importantes. Es por eso que no es extraño ver tanto en grupos como en muros peticiones de apoyo a una página. Hasta ahí, creo que sigue siendo normal.
Personalmente, cuando descubro algo que me gusta, sea un autor, o un libro, o un blog, tiendo a darle el "me gusta" sin esperar a que me lo pidan. Y si me lo piden, por supuesto se lo doy. De hecho, no tengo inconveniente en dar "me gusta" incluso a páginas que no conozco, si su autor está entre mis contactos y me lo pide, o incluso si veo la petición en un grupo y ese día me siento generosa. Total, no cuesta nada, así que, salvo que sea de una temática que vaya absolutamente en contra de mis principios (léase "Peleas de perros" o similares), la apoyo.
Pensando en esto descubrí, de hecho, que "me gusta" y "lo apoyo", en cierto modo significan lo mismo, por eso me gusta apoyar a otros como yo: escritores noveles más o menos poco conocidos, o blogueros que empiezan. A todos nos viene bien un empujoncito para arrancar.
Ahora bien, un día me levanté quizás más susceptible de lo habitual y descubrí que me habían invitado a dar "me gusta" en su página amigos que habían ignorado mi invitación cuando yo la había enviado. Incluso en algún caso he invitado a alguno a darme un "me gusta", me ha enviado al minuto la invitación a hacer lo mismo por él, he aceptado, y... ahí se ha quedado pendiente mi invitación. ¿Despiste? Puede ser, pero me molestó. 

A consecuencia de esto empecé a hacer limpieza de "likes". Hubo quienes me volvieron a invitar, en el momento en que mi nombre dejó de salir en la lista de contactos a los que les gusta la página. No me avergüenza confesar que mandé algún que otro mensaje para informar que gustosamente apoyaría su página, y que, ya puestos, esperaba que apoyaran la mía. ¿Descarado? Puede ser, pero ¿para qué voy a volver a hacerme mala sangre? Mejor pedir las cosas con claridad y dejarnos de malos rollos. Además, los que me gustan, me gustan de todas formas, me refiero a los otros, a los de "favor por favor".
Y aquí es donde yo me pregunto por qué nos cuesta tanto a veces esa reciprocidad. Personalmente, me gusta corresponder al comentario de otro, a una recomendación, a cualquier tipo de favor. He leído y recomendado novelas o blogs de amigas en primer lugar porque me interesaban, pero especialmente porque eran amigas y se merecían esa oportunidad. Me consta que muchas le han dado un voto de confianza a mi novela por eso mismo. A algunas de hecho les ha encantado y la han recomendado a otras amigas, lo cual es un enorme favor, porque en esto del marketing, lo primero que se aprende es la efectividad del "boca a boca". Lo menos que yo pienso que puedo hacer es eso mismo con las novelas que voy leyendo. Según me gusten más o menos, las recomendaré con más o menos entusiasmo, pero es un gesto que no cuesta nada y sirve de mucho. 
Lo mismo es aplicable en muchas otras cosas: los comentarios en blogs, las valoraciones en Amazon o Goodreads, el hecho de interactuar en el muro de otro... Yo procuro hacerlo porque me gusta que los demás lo hagan conmigo, y sé lo que un comentario o una valoración significa a veces para la otra persona. Me encanta ver por ejemplo que una autora que admiro además es una persona cercana y humilde. Demasiados divos hay ya en el mundo ¿no creéis?
Si lo pienso un poco, enseguida llego a la conclusión de que yo actúo así porque es así como me han educado. Lo de "predicar con el ejemplo", "tratar a otros como te gustaría que te traten a ti" y "es de bien nacido ser agradecido" se me debió de grabar a fuego, porque no sé hacerlo de otra manera. 
¿Pensáis que es demasiado esperar? ¿Está pasado de moda? ¿Será que realmente el quid pro quo es una utopía? Me gustaría saber vuestra opinión.


Por cierto, ya que estamos, si queréis, podéis darme un "like" en la página de mi blog El sueño de Lucía y en la de mi novela, Empujones del destino. También me enseñaron que el que no llora, no mama, jajaja...


domingo, 8 de junio de 2014

Marketing para escritores (I) Los sorteos

Esta mañana estaba yo divagando sobre los contenidos del blog y mis proyectos inmediatos. Ahora que he publicado la colección Doce maneras de enamorarse, me veo en la tesitura de ponerme a escribir más relatos, o centrarme en los libros que tengo a medias. Porque sí, que sepáis que tengo varios libros a medias. De hecho, Empujones del destino no es el primer libro que escribí, sino más concretamente el tercero. Tengo otras dos novelas independientes en eterna fase de revisión y corrección (espero que salgan pronto de ella), y una serie empezada. O sea, que por una parte, pienso que tengo ya bastante escrito y sin acabar de perfilar, como para ponerme a empezar cosas nuevas, pero por otro, con lo que me ha costado que paséis por aquí de vez en cuando, que me leáis y que algunos hasta me comentéis, es obvio que tengo que buscar contenidos nuevos para que esto no se quede parado.

Y entonces he pensado que hay muchas cosas que comentar entre todo lo que estoy aprendiendo desde que decidí empezar con el blog. Una de las cosas que más intrigada me tienen es el apasionante mundo del marketing para escritores, es decir, la increíble variedad de formas en las que un autor busca darse a conocer, interactuar con sus lectores, vender más y llegar a más gente. De hecho, creo que esto me da para unas cuantas entradas.

Sinceramente, yo hago lo que puedo. Procuro observar, analizar y decidir qué cosas quiero y puedo hacer yo, y cuales no. De todas ellas podemos ir hablando más adelante si os apetece, pero hoy me voy a centrar en un tema concreto, algo que creo que gusta a todo el mundo y a mi a simple vista me parece que ayuda al menos en gran parte de los objetivos que os comentaba: los sorteos.
A todo el mundo le gustan los sorteos ¿no? Yo por ejemplo, si veo uno que me interesa no dudo en apuntarme. ¿A quién no le gusta que le toque algo? Aunque eso sí, a veces los requisitos son tan farragosos que lo voy dejando y al final se me pasa la fecha. ¿Os ocurre a menudo?

Lo más habitual yo diría que es pedir que sigan un blog, que piquen "me gusta" en una o varias páginas de facebook (el perfil de autor, las páginas de las diferentes novelas que tenga publicadas, etc.), y también que se comparta el enlace o la imagen del sorteo en diferentes redes sociales. También en algunos piden seguir en twitter. Todo esto entiendo que es para llegar a más gente, por supuesto. Conseguir más seguidores implica tener más gente a la que le llegarán nuestras publicaciones ¿no? Y como consecuencia, nuestras novelas se verán más en la red.
En otras ocasiones se pide una foto con un libro del autor. Esto me suele parecer más engorroso, primero porque a mi no me gusta hacerme fotos para ponerlas en internet, y segundo porque lleva más tiempo que picar un "me gusta" o un "seguir". Por lo demás, aparte de conseguir que se vea la imagen de la novela en más sitios, supongo que aquí el objetivo es premiar a quien ya ha comprado, y no a los que sólo están interesados en leer algo de un autor desconocido si se lo regalan.
Parecido objetivo supongo que tiene pedir comentarios en Amazon, al menos, comentarios de compra verificada. Para poder dejar un comentario verificado hay que haber comprado la novela. Por otra parte, es un hecho que la inmensa mayoría de la gente que compra y lee una novela no deja valoración ni comentario, y también lo es que muchos lectores potenciales se guían de los comentarios de otros lectores para decidirse por un libro o por otro. Cuando en un sorteo se pide comentario en Amazon o Goodreads entiendo que se pide principalmente recomendación y por tanto publicidad, y de paso se anima a comprar y leer a quien aún no tenga el libro.

Hasta ahí, se entiende por qué creo yo que se pide una cosa u otra (si me he explicado bien, claro está). Ahora pasemos al punto 2: ¿Y qué se puede regalar?
Yo he seleccionado varias opciones, pero si conocéis más, por favor, contádmelas.

1- Ejemplar de la novela en papel, a menudo dedicado por la autora.
A mí por lo menos me parece el premio más goloso. Principalmente porque aunque lea en digital cada vez más, los libros de papel siempre tienen otro encanto. Y si la autora me gusta, que esté dedicado le da un valor especial, no cabe duda.
Lástima que de momento no tenga nada editado en papel...

2- Marcapáginas
Sinceramente, es un bonito detalle, pero es más bien un premio de consolación, ¿no? Además, salvo que decidamos coleccionarlos, es algo poco práctico. Entendámonos, uno es práctico, quizás dos. Tres o cuatro empieza a ser mucho y media docena es casi una colección, decorativa pero no pensada para ser usada, más aún teniendo en cuenta que actualmente, yo, por ejemplo, leo 8 de cada 10 libros en digital. Tengo uno (que me tocó en un sorteo, todo hay que decirlo), y con ese me vale.
Ahora bien, no descarto empezar a coleccionarlos. Hay algunos tan monos...

3- Agendas o libretas (con la portada de la novela)
Esta es una opción que he visto en algún que otro lado, y sinceramente, me gusta. Me parece práctica y bonita, y además una forma de que la imagen de nuestra novela se vea por ahí. Todo el mundo usa libretas o agendas para algo. Para tomar notas, para apuntar citas, o para escribir borradores, ¿no creéis? ¿Os gusta esta opción?

4-Tazas
Empezaré diciendo que me encantan las tazas. Tengo montones de tazas en casa porque tomo té como si fuera agua. Tengo tazas de publicidad, de Disney, de Port Aventura, de navidad... Pero no tengo ninguna con la imagen de una novela. Supongo que si la portada es bonita, es un buen regalo, pero ¿no es un poco frágil? ¡Qué pena que se rompiera! Práctica desde luego sí es, aunque solo la vea la afortunada, y poco más.

5- Camisetas
Esto, que lo he visto en algún sorteo, ya no me convence tanto. A veces llevan un logo o una frase sencillos y poco comprometedores, pero otras..., seamos sinceros: una camiseta con la portada de una novela romántica-erótica no es muy "ponible". Y mejor no hablamos de dar explicaciones si te empiezan a preguntar.
Es evidente que si la afortunada se la pone, con la portada o con un logo llamativo, nos irá haciendo publicidad. Con un logo discreto será casi una broma privada, lo cual me gusta más, pero sigo pensando que tal vez no es un regalo todo lo útil que cabría esperar.

6-Pequeñas joyas
Esto no vale para todas las novelas, pero para algunas es un detalle precioso y único. Me vienen a la cabeza así, de repente, la fresa con chocolate de "Sorpréndeme", de Megan Maxwell (que no tardó en salir en versión colgante en los materiales más diversos), y el coche de "En la Toscana te espero" de Olivia Ardey, que lo vi por ahí y me encantó. ¿No estáis de acuerdo? Como elemento publicitario es demasiado sutil, pero si es bonito seguro que la afortunada lo enseñará con orgullo, y también lo disfrutará, que es más importante.

7-Libro en edición digital
Una opción económica y aunque quizás no tan atractiva como la del libro en papel, indudablemente buena para dar publicidad a la novela sin dejarnos un ojo de la cara. 
Por cierto, aprovecho para comentar que el blog Vomitando mariposas muertas cumple un año, y sortea de todo (principalmente novelas en digital, en papel, y marcapáginas). Hemos sido muchas las autoras que hemos aceptado colaborar, y digo "hemos" porque yo soy una de ellas. Si estáis leyendo esto y no tenéis "Empujones del destino" (en digital, desde luego, ya que no está disponible en papel), podéis pasar por allí y apuntaros a ver si os toca.
Y como ya he dicho, hay muchísimas novelas más, así que no perdáis más tiempo y pasaos por allí.

Esta es la dirección del evento en facebook:


Confieso que me he apuntado a muchos sorteos, y en lo que va de año, he tenido la suerte de que me tocaran dos libros: No soy la Bella Durmiente, de Teresa Cameselle, que como comenté en su momento, me tocó en Páginas de chocolate hace un par de meses, y Antebellum de Inna Gilles, que me tocó en el blog de la propia Inna, Deseo escrito. Lo he leído ya en digital, pero me hace ilusión tenerlo en papel y añadirlo a mi biblioteca, y espero que algún día me lo pueda firmar y dedicar. 

Pues estas son las opciones que se me ocurren. ¿Se me ha olvidado alguna? ¿Cuál os gusta más? Me vendría bien saberlo por si me animo yo a sortear algo, que conste, jajaja...